Tipos de seguridad en el eCommerce: ¿Cómo funcionan?

A la hora de llevar adelante un comercio electrónico, la seguridad debe ser uno de los aspectos centrales. Esto garantizará la confidencialidad de todos los datos de los usuarios, como los números de sus tarjetas de crédito o sus contraseñas, y reducirá las posibilidades de que tu e-commerce sea víctima de un estafador. Pero ¿Cuáles son los tipos de seguridad en el comercio electrónico? 

Riegos para tu e-commerce

Antes de detallar cuáles son los métodos de seguridad más importantes para un negocio con presencia en línea, es importante hacer un repaso de los riesgos a los que este podría estar expuesto.



Lamentablemente, son muchos: según las estadísticas, las estafas virtuales se dispararon a la par del crecimiento del uso en marketplaces producto de la pandemia. Entre los principales riesgos que podrías enfrentarte en tu e-commerce, encontramos:

• Robo de cuentas.
  Se produce cuando un estafador obtiene los datos de un cliente. Una vez en su cuenta, cambia datos como el domicilio o el número de teléfono.

• Contracargos.
  En este fraude, el usuario malicioso realiza una compra y luego desconoce la operación ante la entidad financiera, obteniendo el producto sin ningún coste.

• Robo de identidad.
  A partir de la sustracción de una tarjeta de crédito o débito, un estafador puede hacerse pasar por otra persona y realizar operaciones fraudulentas.

• Phishing.
  Mediante un correo electrónico fraudulento que simula ser de tu empresa, el estafador obtiene datos sensibles de los clientes.

Tipos de seguridad en el comercio electrónico

Afortunadamente, son cada vez más los e-commerces que deciden instaurar una serie de prácticas para proteger su negocio y, por supuesto, a los usuarios. A continuación, veremos una lista de los métodos de seguridad más importantes que deberías tener en cuenta en tu comercio.

Elegir un hosting especializado en e-commerce

Muchas tiendas virtuales se encuentran alojadas en servicios de hospedaje que no han sido concebidos para ello. Esto puede generar una navegación incómoda para los usuarios, pero eso no es lo único importante: este tipo de sitios no otorgan garantías sobre la confidencialidad de los datos.

Si tienes una tienda y quieres migrar tu actividad hacia el plano digital, o si ya la tienes pero esta se encuentra alojada en un hosting clásico, lo mejor es que consideres migrar hacia un servidor especializado en marketplaces. Una vez que lo hagas, recuerda que puedes instalar el plug-in de Critical.net para reforzar la seguridad en tu negocio. 

Utilizar un protocolo de seguridad HTTPS

El protocolo seguro de transferencia de hipertexto, conocido popularmente como HTTPS, es necesario para proteger los datos que se envían desde una computadora hacia un sitio web. Estos datos incluyen, por supuesto, aquella información sensible de los clientes, como los números de su tarjeta de crédito o sus contraseñas.

Afortunadamente, la mayoría de los marketplaces y servicios de hosting hoy en día utilizan este protocolo. De todas formas, si quieres corroborar si un sitio es seguro, siempre puedes hacerlo verificando si existe la imagen de un candado a la izquierda de la barra de direcciones de tu navegador.

Utilizar protocolos TLS y SET

El protocolo TLS (del inglés Transport Layer Security, que significa “seguridad de la capa de transporte”) es un protocolo criptográfico para autentificar la contraparte con quien se está comunicando. Esto quiere decir que brinda seguridad tanto al cliente como al vendedor, posibilitando la confidencialidad total de los datos.

Por su parte, el protocolo SET (del inglés Secure Electronic Transaction, que significa “transacción electrónica segura”) puede darle un plus de seguridad a tu comercio. Está basado en el uso de la firma electrónica del comprador, y consiste en la necesidad de que la entidad financiera del cliente autorice la compra con el marketplace. En otras palabras, el SET permite que la tarjeta de crédito solo pueda ser utilizada por su titular, con el fin de evitar el fraude. 

Pedir los códigos CVV y AVS

El código CVV es el número de tres o cuatro cifras que figura en el reverso de las tarjetas de crédito. Si quieres ampliar la seguridad de tu e-commerce, puedes requerir este dato a la hora de solicitar la información para que el usuario realice la compra. 

Por otra parte, el código AVS se trata de un sistema que permite verificar la dirección de facturación del titular de la tarjeta. Al realizar esta verificación, las posibilidades de fraude se reducen drásticamente.

Transmitir seguridad a tus clientes

Además de adoptar todos los protocolos de seguridad, es igualmente importante que tu e-commerce transmita confianza a tus clientes y a tus potenciales clientes. Para esto, debes ofrecer información clara acerca de tus productos y promociones, las condiciones de compra, los pagos y las políticas de devolución.

Hacer que tu política de privacidad sea clara y visible para todos tus clientes es sustancial: garantizará que los usuarios sepan exactamente qué información podrías llegar a pedirles y qué información jamás deberían brindar. 

Conclusión

La falta de seguridad en un comercio virtual repercute negativamente en la empresa en múltiples aspectos. Por un lado, le resta seriedad al negocio, reduciendo el nivel de confianza de los usuarios.

Pero, además, puede ocasionar graves pérdidas económicas, tanto por los propios fraudes como por las altas tasas de rechazo de pedidos ante las sospechas de fraude.

Por ello, es necesario acceder a una serie de protocolos de seguridad que protejan tu e-commerce de posibles estafas y robos. También puedes dar un paso más y adquirir herramientas antifraude como Critical.net, que posee avanzados sistemas de automatización para identificar cualquier actividad sospechosa.

Los hábitos de compra están evolucionando hacia una modalidad virtual, y los usuarios maliciosos son cada vez más sofisticados. Es clave que los sistemas antifraude sean igual de sofisticados para garantizar la seguridad de los datos que se transmiten.